"La salud en el fútbol se ve como gasto y no como inversión”: César Ruiz alerta sobre la precariedad sanitaria en el deporte
- dlinares4
- 21 oct
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El Dr. César Mauricio Ruiz Padilla, médico deportivo con trayectoria en clubes profesionales, describe fallas en la atención de emergencias en partidos, la desigual protección social entre jugadores contratados y quienes no lo están, y la brecha entre protocolos internacionales y la realidad de varios equipos en Colombia.

La falta de coordinación en el manejo de ambulancias, la ausencia de equipos interdisciplinarios en clubes pequeños y la insuficiente cobertura para deportistas sin contrato ponen en riesgo la carrera y la salud de jugadores en todo el país. Así lo ve el médico de deportes, César Mauricio Ruiz, quien aseguró además que “en muchos casos, estos rubros, se ven como un gasto y no como una inversión”. El médico reclama cambios en la gestión sanitaria del fútbol colombiano.
Según Ruiz, en muchos partidos locales la ambulancia no está integrada a un protocolo claro: “La ambulancia entra a solicitud de uno”, relata, y añade que en varias ocasiones tuvo que atender jugadores primero en el camerino antes de solicitar el traslado. En contraste, explica, Conmebol y FIFA exigen médicos de campo, coordinadores y capacitación previa para camilleros y conductores de ambulancia, una práctica que no siempre se replica en la liga colombiana.
Ruiz subraya que los clubes grandes disponen hoy de grupos interdisciplinarios, convenios con centros de rehabilitación y recursos para protocolos de prevención; en los equipos más modestos, y especialmente en municipios fuera de las grandes ciudades, el panorama es otro: autorizaciones demoradas para estudios, pocas posibilidades de rehabilitación especializada y una cultura que durante años consideró la salud como un gasto prescindible. “En los clubes pequeños no era nada, nada fácil”, afirma.
Para el Dr. Ruiz, la prevención debe ser prioritaria: evaluaciones preparticipativas rigurosas, caracterización individual de cada deportista y planes de prevención personalizados son esenciales. “Si tú no mides, no conoces tu deportista”, advierte, y explica que la toma de decisiones sobre el alta médica y la vuelta a la competencia requiere un equipo, fisioterapeutas, nutricionistas, psicólogos y readaptadores, que defina objetivos y fases de rehabilitación.
El médico también respondió sobre sus inquietudes acerca de la reforma al sistema de salud, un tema de mucha actualidad para todo el sector. Según él las implicaciones dependerán del texto final y de si se preservan esquemas como el de riesgos laborales que hoy protegen a muchos futbolistas. Mientras tanto, su recomendación a clubes modestos es clara y repetida: ver la salud como inversión, garantizar la presencia de un responsable sanitario en los partidos y formar acuerdos con centros de rehabilitación y profesionales locales. También pide educación temprana, mejor calidad de entrenamiento desde la base, para evitar pérdidas de talento por malos hábitos o por exigir competencias antes de tiempo.
El testimonio del Dr. César Ruiz plantea un reto que excede a entrenadores y directivos: obliga a ligas, federaciones, ministerios y alcaldías a coordinar protocolos, financiar prevención y proteger a quienes no tienen contratos formales. La salud del fútbol, concluye Ruiz, debe dejar de ser vista como un gasto puntual para convertirse en la inversión que sostiene carreras, clubes y comunidades.



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